La cena con R. Casas IV y último cap.

Me planteaba irme corriendo.
Pero había algo que Me lo impedía. Mi curiosidad superaba mi miedo. La escalera era de piedra y muy rústica. Gracias a la escasa pero suficiente luz que me daba el móvil podía bajar los escalones. Iba apoyandome en la fría pared de piedra,hasta llegar a un estrecho pasillo. Me imaginaba que era una escapatoria o salida de emergencia para ciertos personajes que debían asistir al liceo y luego abandonarlo de una manera discreta, sin que nadie los viera. Es difícil calcular el tiempo que había estado caminando por ese tétrico pasillo.

Dos minutos,o quizás tres hasta encontrarme una puerta metálica cerrada que me impedía seguir. Tenia un pasador de hierro pero fácil de abrir pero con un candado grande y cuadrado. Chapeau! El candado estaba abierto. Abro fácilmente la puerta y veo, o intuyo una gran sala porque no veo las paredes. En esta ocasión si que encuentro un interruptor. Del techo de la sala cuelga una triste bombilla. suficiente para ver que en la sala no estaba solo. De repente me doy cuenta de no estar solo. Había alguien de amordazado en una silla de madera en el centro de la sala. Me dirijo rápidamente hacia la persona y veo que esta viva. Es una mujer mayor de unos 80 años aproximadamente. Me acerco algo más para tratar de liberarla. Sr. Soler¡ Ahora la desato. Le quito la cinta americana de la boca y me lo cuenta todo, con todo tipo de detalles el cómo la habían secuestrado el mismo día de la cena. Y que apenas le habían dado comida. Este tranquila ....-Le digo intentando ranquilizarla y le comento de que ya esta a salvo...

En cualquier caso lo dije antes de pensarlo porque a salvo,a salvo ...lo que se dice a salvo... no estaba ni yo! Le desato las cuerdas....y mientras lo hago miro la sala y en un rincón esta apoyado el cuadro del automóvil de casas.
Es autentico....?- le pregunto
La señora Soler ve mi interés en el cuadro, sonríe y me dice.
 -Ha sido un suplicio hasta que llegaras. Por eso que te quiero regalar el cuadro por salvarme....claro. Aunque no me pertenezca te ayudare a sacarlo de aquí. Piensa que es la joya de la corona de Ramón Casas....
-¿Y si nos lo encuentran? le pregunto incredulo.
Me estaba proponiendo robar un Casas!
-Será nuestro secreto. Responde la Sra. Soler.
-"Y el mío!" se oye una voz grave, pero que no desconocida. Y a partir de entonces se fueron sumando voces diferentes, tanto masculinas como femeninas... - "y el mío" - "y el mío" - "y el mío..."
Y de repente se encienden dos focos potentes que alumbran la sala con cantidad de gente que empieza a aplaudir. Estaban todos los invitados, además del agente Cibrian, el portero, y hasta la figura que hacia de discóbolo en las ramblas.

Y me encuentro a Josep, el representante del B. 51 que era el grupo que se reunían mensualmente hace 50 años y me explica que cada diez años se les ocurre homenajear a alguien que no se lo espera, y que esa vez me había tocado a mi....y que me felicitaban de esa manera tan rebuscada y estrambótica...pero que habían disfrutado tanto montándolo todo..
- cabronazos¡ Les grite con tono cariñoso...-lo que me habéis acojonado...
Entonces Josep me cogió del brazo y me contó un secreto.
 - este cuadro que te llevas de regalo, y que todo el mundo se cree que es una buena copia...solo yo sé que es autentico....- me susurro a la oreja, me soltó el brazo y desapareció....
Y ahí estaba yo...dos días después....en el salón de mi casa tomándome un gin tónic , y contemplando ese bonito cuadro del Automóvil ...