Hay un tema que me tiene alucinado. Y es el número 1618. Desde hace tiempo.
El otro día compre un número de Euromillón, que por cierto no suelo hacer. Y los números que aparecían fueron el 01 16 18 33 38 44. Siempre intento relacionarlos con algún teléfono conocido o con algún número que me sea habitual. Por supuesto que no me tocó. Pero en lugar de tirar el billete me lo guardé en la cartera. Es curioso este comportamiento porque siempre lo tiro. Como es normal, no le dí la más mínima importancia.
Por otro lado, una curiosidad que me pasa es que al conducir en coche o en moto sólo me fijo en el cuentakilómetros cuando son números extraños, tipo capicúa o cuando coinciden justo con los miles y similares. No sé porque me pasa eso, pero me pasa.
Y el otro día se me paró la moto. Supongo qué me fijé en el cuentakilómetros para mirar cuantos kilómetros había realizado sin ninguna avería. Alguna cez tiene de ser la primera vez, pensé. Llevo ya 16.183 km. Al cabo de un rato la moto misteriosamente se puso en marcha, y lo atribuí a un mal contacto esporádico. Al día siguiente la moto funcionaba perfectamente. Hoy he ido a llenar el depósito de mi moto. Es cierto que iba al límite de la reserva. Lo sorprendente es que me han cabido 16.18 litros. Y teóricamente caben tan solo 15 litros. Esto me ha extrañado, pero lo que me ha mosqueado es la coincidencia del número. El 1618. Que extraño. Y lo definitivo ha sido ver los cuatro dígitos del reloj del microondas al calentarme mi arroz con lentejas. ¿Adivináis qué número aparecía en el display? Efectivamente 16:18. ( también es cierto que el reloj del microondas se desprogama cada dos por tres...)
Puede ser casualidad. O que la imaginación me juegue malas pasadas. Pero he buscado el número que todavía guardaba en la cartera. Y confirmaba los números.
No sé que será, pero algo querrá decir. He cogido mi pequeño ordenador y he marcado el “1618” en Google. Y me he encontrado con el número áureo y la proporción áurea. Que no es otro que el 1,618033…El número áureo es un número muy especial, es el número que rige el universo. Y lo que he encontrado me ha hecho acelerar las pulsaciones:
¿Pero qué tiene de especial ese número? ¿Por qué no es como los demás? Del mismo modo que el número Pi (3,141592...) representa el cuerpo geométrico más perfecto, la esfera, 1,618033... es el número de la belleza. El monje del siglo XV Luca Pacioli, quizá influido por la idea de que los nuevos conocimientos debían adaptarse a las creencias de la Iglesia, lo llamó La Divina Proporción e indicó: “Tiene una correspondencia con la Santísima Trinidad, es decir, así como hay una misma sustancia entre tres personas –Padre, Hijo y Espíritu Santo–, de igual modo una misma proporción se encontrará siempre entre tres términos, y nunca de más o de menos”. Lo que se esconde tras esta esotérica frase, más propia de alquimistas y ocultistas que de matemáticos, es ese número, el cual se cree que fue bautizado por Leonardo da Vinci con el nombre de número áureo. Siglos más tarde el matemático estadounidense Mark Barr le asignó la letra griega fi, en honor al escultor Fidias, que lo usó en sus obras. El humanista que puso nombre al 1,618033...Hasta aquí todo esto puede parecernos pura numerología. Es como si alguien, con muy poco trabajo y mucho tiempo libre ( y ese no soy yo), se hubiera tomado la molestia de empezar a buscar relaciones curiosas con los números. Sin embargo, lo verdaderamente misterioso es que ese número tan extraño lo encontramos en el crecimiento de las plantas, en las piñas, en la distribución de las hojas en un tallo o en la formación de las caracolas. O en el Partenón. O en el ejemplo clásico de lo que es un cuerpo armonioso: el Hombre de Vitrubio de Leonardo da Vinci. Pollio afirma: “En el cuerpo humano, la parte central es el ombligo. Pues si un hombre se tumba boca arriba, con los brazos y las piernas extendidas, y se centran un par de compases en el ombligo, los dedos de las manos y los pies tocarán la circunferencia descrita a partir de ese centro. Y también puede inscribirse en una figura cuadrada”. Si dividimos el lado del cuadrado (la altura del ser humano) por el radio de la circunferencia (la distancia del ombligo a la punta de los dedos) tendremos el número áureo. Poco a poco Leonardo se fue obsesionando con la búsqueda de pautas que relacionaran no sólo la anatomía con la arquitectura, sino con la estructura armónica de la música y con la propia naturaleza. Su búsqueda de proporciones en el mundo que le rodeaba, al igual que su intento de relacionar la circunferencia de las copas de los árboles con la longitud de sus ramas, fue intensa pero vana. No obstante, no era una idea errónea, porque mirando la naturaleza podemos encontrar el número áureo en diferentes contextos por su inmediato anterior tiende, o tiene como límite, el número áureo. Esto es, esta sucesión infinita de números termina, en el infinito, en el número áureo. Los números de Fibonacci también los encontramos en el número de espirales a la izquierda y a la derecha que podemos contar en las semillas de los girasoles y en las piñas de los pinos; en el número de pétalos de las flores (3 el iris; 5 o bien 8 en algunos ranúnculos; las margaritas y girasoles suelen contar con 13, 21, 34, 55 ó 85...) y en el número de flores en las espirales de la coliflor y del brécol. De hecho, cada uno de ellos es una diminuta coliflor en sí misma. Si cuenta las espirales en ambas direcciones que salen de esas miniflores, ¿qué número le sale? Puede buscar así mismo números de Fibonacci en el plátano y en la manzana. Incluso las hojas alrededor del tallo siguen este orden.
¿Qué se supone qué debo hacer ahora? ¿Es qué significa algo importante o es fruto de las casualidades?. La verdad es que no puedo hacer nada diferente, pero yo de vosotros no me acercaría mucho a mí …por si las moscas…
Pd: si habéis llegado hasta aquí os aconsejo www.youtube.com/watch?v=j9e0auhmxnc, donde explica perfectamente lo misterioso del numero phi. Espero no obsesionarme tanto como Leonardo, pero joder, tiene miga el temita!!!. Y hoy me pienso tomar la pastillita para dormir porque sólo me faltaría ver 1,618…ovejitas saltar una valla!
1 comentario:
Hola Juan, si te interesa como veo este número sagrado y aureo, leete este libro de un amigo mio, explicado fácil y divertido y muy interesante. Además Jaime es un erudito de el Monasterio del Escorial, como verás en el libro y eso queqa cerca de Madrid, por si te animas...
http://www.revistafusion.com/20081128608/Entrevistas/Entrevistas/geometria-sagrada-jaime-buhigas-arquitecto.htm
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