Hoy teníamos dudas de si nos quedábamos a descansar después d muchos días seguidos de Kayac, Pero el mar estaba como un plato. Es de esos día que nos gustan tan poco a los que navegamos. Mucho calor sin nada de viento,
Ha sido el primer día de esos que eran tan típicos antaño.
Desición salomónica, Montse a nadar y yo en kayac. Con este mar es un pecado no salir. Hoy he aprovechado para conocer todos los recovecos de cala salguer, en dónde saludo a una señora y a su perra setter (lina) que se pasa atenta mirando concentrada en el agua poco profunda. Haber si pilla algún pescadito y resuelve el desayuno de su “ama”.
“Jjajajaj” - me comenta la señora- “A pesar de ser perro cazador nunca ha pescado nada. Y se pasa horas.”
Sigo bordeando Salguer, es curioso ver como se comportan los lugareños recién amanecidos. Te miran ignorándote como si fueras el culpable de estropear sus privilegiadas vistas, Le saludo con un “Bon día” dirigiéndome serpenteando entre las rocas hacia la casa Rosa de Castell. La tienen alquilada. Era la “casa dels masovers”, No hay nadie, pero ya se han levantado, lo sé porque han abierto la sombrilla de la terraza. Me quedo un rato mirando la maltrecha rampa de cemento destrozada por los temporales (que pena…) y que por donde antaño subían las barcas. Paso por delante de la mini playa nudista donde hay tres chicas y dos chicos. No sé que gracia le encuentran exhibir sus vergüenzas, y máxime cuando el personal ya entrados en años ya están afectados por los efectos de la gravedad. Allá ellos, si les gusta “que li farem”.
Paso por delante de los kayaks de alquiler. Vaya negocio tiene montado! A juzgar por la cantidad de Kayacs que están preparando .
Sigo bordeando la casa de pescadores (eso si es una casa de pescadores “com il faut” y no la barraca de Kiku. Que habrá sido del Okupa que vivía ahí?.
Sigue el agua transparente y calmada y entro en la cueva, situada debajo del poblado ibérico y en la cual no he podido dar la vuelta debido a la eslora del Triana y salgo “marcha atrás”.
Pensaba yo que en un día como hoy, los iberos debían de entrar en esta cueva y ver los mismos recovecos y oquedades que estaba viendo yo e imaginando que deberían de pensar esos iberos ante esa contemplación.
Sigo mi trayecto y entro en cala foradada. Ohhhh premio!. Nadie!. Voy hasta el lugar en dónde esta enterrada Natalia. Le pregunto como está y a su manera me responde. “Todo bién”. Me meto con el kayac por el “forat” . Me voy fijando por si encuentro futuros fondeos con él Medusa y salgo a una playita en dónde permanezco unos segundos “disfrutando” del silencio, perturbado por el canto de las cigarras. Por el intervalo de canto pienso que hoy será un día caluroso.
Pero que afortunado soy pienso mientras me dirijo a la águlla de Castell, paso por dentro y apunto ya hacia la fosca. Voy rápido, el Garmin marca 4.3 kn y eso en el Triana es ir rápido
Cada vez lo hago mejor esto de remar, o no , pero estoy consiguiendo poder pensar mientras remo
Me cruzo con Marga en pádel , y veo al Ciao vela a toda máquina hacia Salguer. Llego a la par que Francesc y Montse pensando en como es posible dudar si salir habiendo tenido tantas grandes experiencias en tan poco tiempo.
Sólo son las 9.30. Empieza el día…