En los medios impresos (prensa y revistas) siempre ha existido una tendencia para intentar ofrecer acciones lo más espectaculares posibles. Y más, en una época que se cuestionan las rentabililidades (ROI) en las publicidades de revistas en cuanto a inversiones publicitarias.
Acciones espectaculares se pueden hacer muchas. Pero normalmente siempre nos encontramos con el mismo problema. El precio. Son creatividades diferentes, que aportan un plus cualitativo que a veces no son lo suficientemente importantes en notoriedad en comparación del precio que se pagan por ellas.
Pensemos que cualquier sola manipulación manual de una revista hace multiplicar la inversión en una campaña de publicidad.
Con la imagen impresa se ha intentado innovar ofreciendo a veces imágenes “tipo lenticulares” que incorporan varios efectos. Desde un efecto de varias imágenes en una hasta efectos de movimiento, con sólo mover la imagen o revista física.
Otra asignatura pendiente es incorporar luz o sonidos. Hace dos años salió en EEUU una revista ( Squire) que incorporaba en su portada una tinta “luminosa” y hacía que la marca parpadeara, como si fuera un neón. También se ha hecho algo con “chips” musicales en alguna revista. Aunque todo lo que se ha hecho ha sido anecdótico.
En época de crisis se han frenado casi en seco todas esas iniciativas, que si bien eran creativas si que el desembolso económico era sustancial.
Incluso la publicidad convencional se ha reducido con los mismos formatos. Ahora la tendencia es hacer una página en lugar de una doble…claro es mitad de precio. Pero todo ello, en su conjunto, hace que cada vez más seamos nosotros mismos los que presionados por los presupuestos cada vez más ajustados de nuestros clientes hagamos campañas más mediocres, presionados por los bajas inversiones en esos medios.
Suerte que de vez en cuando nos llegan excepciones con creatividades ciertamente impactantes y que hacen que las revistas no sean un medio caduco, aburrido y estático como muchas veces se ha insinuado.
Se que es muy fácil decirlo y muy difícil ponerlo en práctica pero debemos de cambiar el “cheap” o la manera de pensar. A partir de ahora piensa “en grande” “Think big”o sino en grande en diferente. Eso es fundamental
Y el ejemplo es la campaña de Lexus en una revista americana llamada Sport Illustrated
Seguro que Lexus se ha gastado (sería mejor decir invertido) más dinero de lo que le hubiera supuesto una campaña de páginas convencionales…pero estoy convencido que el esfuerzo le ha valido la pena.
Campaña ingeniosa y espectacular donde se incorpora sonido, luz y movimiento (vista, sonido y tacto!) en una página de publicidad. Claro que para todo ello necesitaremos un Ipad o tableta para colocarla debajo de la página…pero ¿qué más da?.
Think BiG!