La lotería de Navidad

Yo creo en el destino. el hecho de haber nacido en un buen lugar, en una buena familia y en una buena época. Eso si que es una lotería.

Me ha tocado el gordo desde el 1964. Cuando nací.

Me podía haber tocado nacer en un país pobre del África o de Asia. Sobrevivir a la hambruna o a las guerras,  o no sobrevivir o simplemente no nacer.

Pero no, mi destino ha sido nacer en un sitio privilegiado. Al lado del mar, pero también muy cerca de la montaña

Eso es algo que muy pocos en mi entorno valoran.

Extrañamente  una lotería no valorada por muchos, ignorantes , pero es que en realidad no se dan cuenta  la suerte tienen, tenemos. El tema es que sólo valoramos las cosas cuando ya no las tenemos.

En cuanto a la lotería de Navidad, más allá de las anécdotas de todos los años, lo felices que parecen las personas agraciadas, sin darse cuenta que en su mayoría serán unos desgraciados,  que si bien un buen  “pellizco” les permitirá vivir durante un tiempo sin agobios. Se cambiaran el coche y pagarán la hipoteca…y poco más porque ni el gordo da para mucho más. La conclusión es, que si hasta ahora no has sido feliz, por mucho que te toque la lotería, no lo vas a ser.

Leí no hace mucho un artículo al respecto. Explicaba qué había sido de los ganadores  años después de ganar el premio…

Terrible. Muchos arruinados y más desgraciados que antes. Algunos propietarios de inmuebles y coches pero creyendo que contaban con muchos amigos  y han acabado solos y recelando de lo poco que ya les queda. Y alguno, pero muy pocos, considerando que fue una suerte y que  ahora era más feliz que antes.

Y es que por eso pienso que nuestra vida ya está “destinada”.

El porqué a mí , es la pregunta que se hace el que coge una enfermedad grave  o aquel otro que en una caída desafortunada se quedó paralítico. Pues eso son otras formas de loterías.

Vivamos lo que nos queda sin pensar en  porqué  no nos ha tocado el número, sino pensando en que nos tocó el gordo en el mismo momento en que nacíamos.

Estoy en la mejor tierra del mundo . Un lugar espectacular. Donde podemos navegar en aguas azules!. Esto que parece una obviedad, no lo es tanto. He navegado en Suecia, con unas aguas turbias que ya les gustaría, por no decir Alemania u cualquier otro país. En Argentina tienen el Mar de la plata, pero de verdad que no tiene nada que ver. Navegar en la Costa Brava y en el Forum (Barcelona) es un auténtico privilegio. Y eso es otra lotería.

Por eso que a mi me tocó hace 55 años y no me ha parado de tocar. Poco que envidiar.

Si que me gustaría comentar el caso de un señor ( de momento) anónimo de Mollerusa que apostó la friolera de más de 7.000 euros en la lotería a un número y le tocó el tercer premio, pero con esa inversión representa que ha ganado más de 18.000.000 de euros. Todos dicen: “pero que suerte ha tenido…” pero si lo pensais bien es algo muy raro, porque nadie apuesta tanto (7.000€) por una premonición.

Yo apostaría a que él ya lo sabía.

Alguien ha ido a ver al mago Pop? . (Lo tengo pendiente) aunque ya sé que alucinaré. Hace cosas que no son explicables a nuestras mentes…por eso que el que salga un número determinado en la rifa está al alcance de esos “magos”…

El señor de Mollerusa podría  ser un aprendiz del mago Pop…y que sabiendo algo

de magia, lo ha bordado…Se podría llamar Javier Ruperez.

Javier Ruperez, lo tenía todo pensado. Sólo un truco, pero el definitivo. No buscaba dedicarse a la magia, ni vivir de sus actuaciones, si le salía bien el truco le serviría para retirarse de por vida sin tener de trabajar. Eso sí. Se pasó 7 meses preparando el truco, Sabía que le podía salir bien.

Lo tenía todo previsto invirtió todo lo que tenía y lo que no en ese número.

La fecha el sorteo de Navidad. El público, todo el país pendiente del tercer número. Todo bajo control. Había salido perfecto. El primer y último truco del gran Ruperez. El mago desconocido de Mollerusa.