lunes, mayo 27, 2013

Camí de Cavalls MTB 2013.




Me gustaría comprobar si los equinos son capaces de pasar por dónde nosotros pasamos!
Cansado. Muy cansado. Pero contento habiendo realizado de lo mejorcito que he hecho nunca en MTB. Por no decir lo mejor.
Increíble experiencia. Dura, muy dura. Pedalear por terrenos pedregosos. A veces demasiado, en donde no tienes más opción que bajarte de la bici y empujarla. A veces cargarla al hombro para remontar un barranco. Y así salieron dos etapas. La primera de 100km y la segunda de 85km.
El paisaje?...Si…uffff ahora estoy seguro que el paraíso existe….y debe estar por ahí…en una de esas calas de ensueño, seguro!.
El infierno también existe. Camuflado claro…en los imposibles pedregales en donde te vas destrozando las manos y los hombros…hasta que te encuentras que el terreno es tan hostil que te encuentras bajando de la bici y seguir caminando, si hay suerte y no tienes de cargarla al hombro.
Y todo eso durante dos días. El primer día todo el norte. Desde Ciudadela hasta Mahón. El segundo todo el sur. Volviendo a Ciudadela.
Bajar por barrancos, acabando en calas paradisíacas, y pedaleando sobre playas. Bajamos muchas trialeras imposibles, las subimos también...
Que lujo! Iba muy bien arropado por los Galofré ( Qué máquinas!). Me consideraba un marqués. Diego y Gon se adelantaban para abrirme las puertas (tancas que son muchas!) que separan los campos y así no tener de bajar más de lo necesario. En las zonas de rodar me beneficiaba de su rebufo, todo para que no sufriera más de lo necesario.
Paisajes que sacados de contexto uno no sabría si está en Suiza o en la Polinesia. Aguas azules, turquesas, transparentes. Pasamos por campos con flores!!.Bosques frondosos. Una vegetación espectacular. Ni los lugareños recuerdan un año de lluvias como éste!
Si Gon y Diego no me hubieran ayudado en los momentos de “crisis” (que los hubo) no hubiese acabado. Después de once horas el sábado y ocho horas el domingo, Finisher que es una manera de decir un final feliz… sin final feliz!
Ahora que nadie me oye, os confieso que tuve dudas el domingo de continuar. El castigo del sábado podría pasar factura. Y tuve muchas dudas.
Pero suerte que no lo hice. Al final, varias conclusiones:
1. Menorca no es pequeña
2. En Menorca hay desnivel (Si no, uno no hace las 2100m de desnivel de subida el Sábado)
3. En Menorca hay muchas piedras. Pero muchas!
4. Qué bueno es tener amigos!

3 comentarios:

alfredo vazquez dijo...

Gran resumen... Te veo haciendo la crónica de Suecia

foncu dijo...

nooooo querido Alfredo...zapatero a tus zapatos. Tu el cronista y yo el friki...y tan amigos!

Josep M. dijo...

Collons Joan !!! veig que segueixes a tope com si res ....
ets un crak