martes, marzo 12, 2013

Por fin....la regatas de Capriccio



La vuelta a las regatas con el platú

Domingo de hace ya dos semanas. Como pasa el tiempo!!! ….No puede ser que este tanto tiempo sin escribir!...
Estuvo muy bien, porque entre otras muchas cosas el día acompañaba en nuestra primera regata RI ( es decir con tiempos compensados y no en monotipo ). Aunque el monotipo parece que no sea el barco de moda…por lo menos en Barcelona.
Más de un año sin navegar en platu 25 . Y os garantizo que todavía flota. Ahora nos inscribimos en la regata con el nombre con el que compramos el barco que es Capriccio. Buen nombre y adecuado a los tiempos que corren, donde los “caprichos” pasan a un segundo plano.
Hay gente que opina que el nombre de un barco no se puede cambiar…si se llama capriccio pues por algo será. Aunque realmente creo que sería más apropiado “desahogo” o “necesidad” porque nos produce a todos un efecto de liberación de pájaros.
Gran regata… o inicio de regata porque en realidad cuando llegamos a donde teóricamente debía de estar la boya…el temporal se la había llevado. Estamos el fin de semana entre dos temporales. (“de levante”).
Pero que bien lo pasamos y a las 2.30 h ya estábamos vuelta. Virtualmente ganadores, porque todo es una cuestión de ver el vaso medio lleno o medio vacío. Pero sin mucho viento, sin mucho mar…pero lo suficiente para disfrutar. Y mucho.
El sábado (el pasado sábado) siguiente volvimos a regatear. Esta vez con viento. Mucho viento y con otro platu en la regata. Buenas sensaciones aunque la ceñida fue dura porque tuvimos algún que otro “pollito”. Además el compass tacktick dejó de funcionar pero poco a poco nos pondremos a tono. Un día duro pero espectacular.
Ya de vuelta…aunque sin sponsor, pero eso tiene una parte muy buena. Que si queremos navegar navegamos y sino no. Aunque yo creo que este año todo indica que navegaremos bastante…¿será porque el mar hace de psicólogo natural?...supongo que será eso.

martes, febrero 19, 2013

La llegada


Piel de gallina. Yo iba a ver la llegada de mi amiga en la media maratón de Barcelona el pasado sábado. Unos 17.000 participantes. 3000 mujeres. Impresionante la cantidad de gente que se apunta a esto del running.

Llegué a la meta para verla llegar cuando el crono “oficial “ indicaba 1 hora :35 minutos” “perfecto” pensé yo. Si todo iba bien, la vería llegar. El tiempo que estimaba que realizaría si todo iba bien estaría entre 1:45´ y 1:55´ ….Lo que no contaba es que ella no había salido de los primeros porque la salida de su grupo se demoró entre 10 y 15´. Total, que por muy poco pero no la vi porque a las 2 horas de carrera me fui a buscarla a la llegada pensando que ya había entrado y no la había visto.

1: 51´ fue su tiempo real pero claro que no la vi. En el crono de la llegada debería marcar 2: 01´. Fue una pena, pero eso me pasa por impaciente. Por un minuto! Una pena pero me quede impresionado de ver cómo llegaba tanta gente durante esos 25´. Francamente, me encantó. Ya sé que en ese tiempo todos los “pro” ya habían llegado, pero lo realmente interesante era ver llegar a todos los demás. Cada uno con una forma de correr diferente. Correr es algo que nadie te enseña y que haces de una manera natural. Llegaban constantemente. Gente de todas las edades, con las fisonomías más variopintas con todo tipo de indumentarias, solos o acompañados, o solos con su música. Daba igual, pero todos felices de llegar.

Lo que impresionaba era ver el comportamiento y las reacciones de la gente cuando llegaba. O mejor dicho unos 100 metros antes. Mucho mejor. Cuando era evidente que en ese momento los corredores ya saben que “han llegado”…que lo han conseguido. Y lo celebran de muchas maneras. Cada uno con la suya. Los hay que lloran. Atrás han quedado los interminables días de entreno, las dudas, las apuestas personales, los que corren por alguien que ya no está, los que corren porque se intentan demostrar que lo podían hacer y lo han hecho. A veces ves a gente totalmente emocionada, casi arrastrando los pies, piensas que detrás de ese rostro emocionado hay una historia de superación. Parejas llegando de la mano y apretándose la mano. Otros que lo celebran extendiendo los brazos como si llegaran en avión. Los que esprintan porque aún les quedan fuerzas. Los hay que gritan apretando el puño.

También los había que entraban con bebés en brazos, o los que grababan el momento de la entrada para inmortalizarlo. Sé que es gente anónima, que nunca saldrán en la prensa como deportistas de élite. Pero por eso mismo, precisamente porque para ellos era un reto conseguido, era emocionante. Muy emocionante. Felicidades a todos ellos. Uno se da cuenta que a pesar del esfuerzo y sacrificio que supone, y aunque mucha gente no lo entienda, “eso” vale la pena. Y mucho!.

lunes, febrero 11, 2013

Compra un caballo! porque un polo mola más...


Curioso anuncio el de WV polo.

Son tres amigos que quedan en un bar y comentan la casualidad de que se han comprado un polo, y están encantados y expresan lo contentos que están. Luego entra en el bar un cuarto amigo y comenta que se ha comprado un caballo. Salen todos a dar una vuelta encantados cada uno con su adquisición. Al final del anuncio los amigos del “polo” miran al del caballo como si se hubiera equivocado comprando un caballo.
El coche puede estar todo lo bien que uno quiera…pero comprarse un caballo dice mucho más de uno. Porque es diferente, porque es auténtico, porque indudablemente hoy en día la compra de un caballo implica mucho más que un medio de transporte, porque requiere un carácter especial.
Puede que a los creativos del anuncio les parezca muy bien, e intenten transmitir que la compra de un “polo” es algo racional…"comprar un polo "mola" más...!" uffff  pues que quereis que os diga?
Será lo racional que quieran pero sólo es un coche!!!...desde luego si uno tiene de elegir me decanto a elegir al del caballo…
Imaginaros a los de los polos…muy bien, pero siempre irán solos el del caballo siempre tendrá a un amigo con quien ir en coche!!!
Lo triste es que en realidad la inmensa mayoría hacemos lo mismo que los demás y eso nos impide ser nosotros mismos. Es una pena pero si alguna vez tenéis la oportunidad de compraros un caballo aplaudiré vuestra decisión. No sé si os equivocareis o no, no puedo juzgar de lo que no sé pero tendréis mi admiración seguro!