miércoles, mayo 20, 2009

La comida con Guillermo

Cuando me llamó Guillermo para ir a comer, poco me imaginaba el proyecto de negocio que me iba a explicar. Creía que hablaríamos sobre temas de publicidad. Nada más lejos. Con aquello de te lo cuento pero no se puede decir…y que siempre produce el efecto contrario.
- joder Guillermo si es tan secreto no me lo cuentes.- le dije
- Es que quiero contártelo pero me tienes de prometer…
- Venga no te enrolles…
- Ya sabes que esto de la publicidad va a la baja…y desde hace un tiempo que estoy mirando alternativas – me explica
- Escupe. ¿Que te han ofrecido? – Le pregunto incitándole para que vaya al grano
- No. Sólo que me monto un business por mi cuenta…-
- Joder que envidia…pero tu crees que es el momento?
- Precisamente. Se trata de una piscifactoría pequeña. Bueno de hecho son dos.
- No me jodas! Desde cuando tienes algo que ver con el mercado del pescado…
Entonces me lo explica abiertamente. Pero un poco agobiado. Ha conseguido contactar con un científico francés que ha conseguido reproducir miles de medusas en poco tiempo. Lo malo o lo bueno, según se mire es de que son una especie de medusas peligrosas, es un tipo de medusas llamada “carabela portuguesa”. El tal científico, llamado Philipe se puso en contacto con el director de unas revistas del corazón, para que hablara sobre lo peligrosas de estas medusas.
- Pero…ahora si que no entiendo nada…que coño pintas tu con las medusas.
- El tema es darle repercusión a bombo y platillo sobre la carabela portuguesa y sobre la peligrosidad de estas medusas. De hecho llegaron algunas a la costa cantábrica y la prensa se hizo eco de eso.
- Sigue que se pone interesante….
- El asunto es “esparcir” unas cuantas cerca de la costa…especialmente la costa mediterránea, y dejar que las corrientes actúen. Se genera el pánico en la población y entonces llego yo con el pez que estoy “cultivando”, que es el único pez que come este tipo de medusas, y “limpio” la costa de picaduras de medusas. Los ayuntamientos encantados en contratarme, al precio que sea. El pánico de los bañistas es la peor plaga que se pueden encontrar. Especialmente en Agosto.
- Tu previamente has contactado con los ayuntamientos y les ofreces el antídoto antimedusas. ¿No es eso?.
- Pues más o menos. Yo les cobro por playa 35.000 euros y les garantizo la extinción de todas las medusas. Ellos lo pagan, porque son recursos del ayuntamiento y todos contentos. Facilmente en la costa española puede haber unos 200 ayuntamientos con playa… Son 7 millones de euros en sólo mes, y eso esta bien…no crees?
- ¡Eres un pedazo de cabrón!- le digo indignado
- Lo que quieras pero el mundo funciona así. Generas el virus y luego vendes el antídoto. Funciona en todos los sectores…Farmacia, informática, hasta en la publicidad…es ley de vida- me explicaba Guillermo intentándose justificar
- Porque me lo cuentas a mi?
- Porque necesito contárselo a alguien…
- Joder Guillermo, estás como una puta cabra…- apurando la jarra de cerveza
- Ya lo sé. Pero te gustaría hacerte socio mío?
- Ni jarto de vino!. Eso debe se ilegal de la leche…no?
- En absoluto. Tu tienes dos pequeñas piscifactorías. La del pez y la de su alimento, en este caso la medusa carabela….a mis peces les encantan las medusas…Bingo!. Y además luego puedes vender el pescado en las lonjas de pescado.
- ¿Como dices que se llama ese pececito?- le pregunto a Guillermo sospechando a que pez se refiere
- No lo conocerás, porque lo importo del Japón y es un extraños pez luna que lo llaman Fugu.
- ¡No me jodas! – grite a Guillermo mientras levantaba la mano llamando al camarero. Necesitaba un whisky….y que fuera doble!

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martes, mayo 19, 2009

y tú...¿comerías Fugu?

Estamos en un restaurante japonés. En Tokio. Cuando vemos que en la mesa de al lado un ejecutivo con traje oscuro, se levanta y cae al suelo, en donde comienzan sus convulsiones por los brazos, para acabar con convulsiones por todo el cuerpo. Los músculos se le paralizan y al poco tiempo deja de respirar pero el corazón sigue latiendo. Es terrible.
Los camareros, sorprendentemente no le ayudan sino que evitan que la gente le pueda ayudar. Le masajean como intentando consolarle pero saben perfectamente y el ejecutivo también lo sabe, que la muerte es inevitable..Al cabo de tres minutos muere. Saben que no se podía hacer nada. Entonces, se lo llevan en una camilla. Los comensales vuelven a las conversaciones habituales y aquí no ha pasado nada.
¿Que parece invención.? Si pero no lo es. Pasa cada vez menos pero pasa.
No ha sido ni un ataque de corazón ni nada similar lo que ha fulminado al ejecutivo sino que ha sido la tetratoxina. El veneno del Fugu. El pez más exquisito que existe. El comerlo provoca el éxtasis a quien se lo come, pero a su vez el más caro y peligroso del mundo. El plato de fugu cuesta unos 300 euros. Pero sobretodo sino esta perfectamente limpio de veneno, la muerte se produce en pocos minutos. Y no existe antídoto. En la mayoría de las treinta especies diferentes de Fugus que existen en Japón la tetratoxina se localiza en el hígado en los órganos genitales y en los huevos
Durante muchos años estuvo prohibido debido a las decenas de muertes que se producían. Pero la gente seguía comiendo el Fugu no podían evitar la tentación del placer que producía. Hoy en día ya no es habitual tantas muertes, aunque se siguen produciendo, principalmente porque el cocinero del Fugu de los restaurantes debe pasar por una Academia durante tres años para aprender a cocinarlo. No se tolera ningún error. Cuando se examinan lo prueban ellos mismos. Y por la cuenta que les trae se esmeran en limpiarlo bien.
Cada año en la región de Shimonoseki se licencian unos 60 aprendices. Hay está el principal mercado de Fugu. Para limpiarlo se debe cortar el pescado cuando todavía está vivo, porque así se evita la propagación de la tetratoxina por toda la carne del pescado. De hecho, el pez Fugu también se llama pez globo. Cuando se siente amenazado se hincha y propaga la tetratoxina por la piel aunque no es lo habitual.
Como para invitar a los amiguetes y decirles “hoy os cocino yo …y os vais a “cagar”!!!, Nunca mejor dicho cuando les dices que les vas a preparar un fugu al pil-pil de la ostia! . En cualquier caso, en Japón conocen los riesgos y siguen consumiéndolo. El placer que produce su ingesta compensa el riesgo, aunque sea la muerte.
En Japón no lo llaman Fugu, porque se traduce como “culo de saco” sino que lo llaman Fuku que quiere decir “felicidad”. En algunas partes indómitas lo llaman Fonku, pero en este caso si que los órganos genitales y los huevos coinciden…vamos eso creo yo. Así que ya lo sabéis, cuidadito conmigo no sea que me enfade y me hinche y ya la hemos liado…

1,618 (2ª parte)

Yo sigo con el tema, preguntándome si el número áureo y yo tenemos algo en común o no. Desde luego todos los que han descubierto la proporción han conseguido grandes logros. Desde arquitectos hasta pintores. Dalí es uno de ellos. Claro que sabe pintar. Pero todo su snobismo era un disfraz para ocultar su genialidad en las aplicaciones de la proporción áurica. Me voy fijando y en todos sus cuadros rige esa proporción.
Supongo que un buen día descubrió lo que podía llegar a hacer con el número de oro (phi) y lo empezó a aplicar a destajo. Luego, acompañaba sus aplicaciones con actuaciones personales teatrales que lo tomaban por auténtico loco, eso hacía darle más fuerza. Ocurre más de lo mismo a quienes se han dado cuenta de las propiedades del número de oro. En todas las artes está presente la proporción áurica. Hasta los platos rectangulares del Bulli de Ferrán Adría cumplen esas proporciones mágicas. ¿Tendrá algo que ver con su éxito?.
Como parece que he sido yo el elegido. Será cuestión de ponerse manos a la obra.
Siendo prácticos habrá que mirar como yo puedo aplicar ese número en lo que hago porque me parece imposible que pueda aplicarlo en alguna de las actividades que hago. Como no sea en….ostras casi se me escapa!. Si me va bien ya os enterareis, y si no también….pensar también vosotros en aplicarlo.
Cojamos una coctelera y empecemos por los ingredientes: Un 60% de ilusión, un 10% de conocimiento, un 10% de paciencia, un 10% de constancia y un 10% de proporción áurea. Lo agitamos frenéticamente durante diez minutos al puro estilo Boada. Y esperamos que repose. Lo dejamos 24 horas. Y cuando volvemos…Tachin,tachin…Ostias… ¡un espantapájaros! Que cutrada! Pero ¿ que os pensabais?. ¿Quién os había dicho que sería fácil?. Pero lo seguiremos intentando..
¡!Coño, Foncu que hay que tener un “arte”!! me aclara el sms que me acaba de entrar en el móvil. Por supuesto del remitente el número 1618, manda guevos!