martes, marzo 12, 2013

Mi nueva fixie...Será tan diferente!



Estoy con el rollo de mi nueva fixie. Es divertido pensar el cómo quedará. Combinación de colores de cuadro, de colores de ruedas, neúmaticos, cadena etc…pero todavía hay que esperar un poco…El proveedor de ruedas se ha quedado sin stock!
Me está ayudando Osky, un tipo pseudo hippy, amigo de Jorge, pero entrañable. Él se encarga de todo , de pintarme el cuadro (de color blanco pero que por la noche cobra vida porque es una pintura especial luminiscente) pero también me montará todo lo demás. Las ruedas parece que serán negras…me dejo llevar por lo que me dice.
Ya tengo ganas de tenerla. Muchas ganas. Porque la fixie es algo muy especial. Es algo más que una bici de “diseño”. Es una manera diferente de ver las cosas. Que difícil de explicar!
Aunque con las bicis me pasa algo similar a las motos. (las “impala”, las harley´s , las triumph,las bmw…etc) Si es que me gustan todas. Me gustan las bicis de mtb ( me encanta la mía) , me gustan las de carretera aunque reconozco que nunca las he probado ni probaré por peligrosidad, aunque seguro hay el que me dice que es mucho más peligroso la fixie que la de carretera, pero se equivoca…También me gustan las Bronton…En fin creo que me gusta todo lo auténtico…y eso me pasa también con las personas.
En esa línea me encanta el nuevo anuncio de Decathlón. Un tipo que se despierta a las 7:05 para poder probar su bici nueva. Pero lo que más me gusta del anuncio es la cara que pone de felicidad cuando contempla su nueva bici. No penséis que es un tema de consumismo, aunque lo parezca. Pienso que es más un tema de sensibilidad y disfrute…vamos, como lo mío y la fixie!

Por fin....la regatas de Capriccio



La vuelta a las regatas con el platú

Domingo de hace ya dos semanas. Como pasa el tiempo!!! ….No puede ser que este tanto tiempo sin escribir!...
Estuvo muy bien, porque entre otras muchas cosas el día acompañaba en nuestra primera regata RI ( es decir con tiempos compensados y no en monotipo ). Aunque el monotipo parece que no sea el barco de moda…por lo menos en Barcelona.
Más de un año sin navegar en platu 25 . Y os garantizo que todavía flota. Ahora nos inscribimos en la regata con el nombre con el que compramos el barco que es Capriccio. Buen nombre y adecuado a los tiempos que corren, donde los “caprichos” pasan a un segundo plano.
Hay gente que opina que el nombre de un barco no se puede cambiar…si se llama capriccio pues por algo será. Aunque realmente creo que sería más apropiado “desahogo” o “necesidad” porque nos produce a todos un efecto de liberación de pájaros.
Gran regata… o inicio de regata porque en realidad cuando llegamos a donde teóricamente debía de estar la boya…el temporal se la había llevado. Estamos el fin de semana entre dos temporales. (“de levante”).
Pero que bien lo pasamos y a las 2.30 h ya estábamos vuelta. Virtualmente ganadores, porque todo es una cuestión de ver el vaso medio lleno o medio vacío. Pero sin mucho viento, sin mucho mar…pero lo suficiente para disfrutar. Y mucho.
El sábado (el pasado sábado) siguiente volvimos a regatear. Esta vez con viento. Mucho viento y con otro platu en la regata. Buenas sensaciones aunque la ceñida fue dura porque tuvimos algún que otro “pollito”. Además el compass tacktick dejó de funcionar pero poco a poco nos pondremos a tono. Un día duro pero espectacular.
Ya de vuelta…aunque sin sponsor, pero eso tiene una parte muy buena. Que si queremos navegar navegamos y sino no. Aunque yo creo que este año todo indica que navegaremos bastante…¿será porque el mar hace de psicólogo natural?...supongo que será eso.

martes, febrero 19, 2013

La llegada


Piel de gallina. Yo iba a ver la llegada de mi amiga en la media maratón de Barcelona el pasado sábado. Unos 17.000 participantes. 3000 mujeres. Impresionante la cantidad de gente que se apunta a esto del running.

Llegué a la meta para verla llegar cuando el crono “oficial “ indicaba 1 hora :35 minutos” “perfecto” pensé yo. Si todo iba bien, la vería llegar. El tiempo que estimaba que realizaría si todo iba bien estaría entre 1:45´ y 1:55´ ….Lo que no contaba es que ella no había salido de los primeros porque la salida de su grupo se demoró entre 10 y 15´. Total, que por muy poco pero no la vi porque a las 2 horas de carrera me fui a buscarla a la llegada pensando que ya había entrado y no la había visto.

1: 51´ fue su tiempo real pero claro que no la vi. En el crono de la llegada debería marcar 2: 01´. Fue una pena, pero eso me pasa por impaciente. Por un minuto! Una pena pero me quede impresionado de ver cómo llegaba tanta gente durante esos 25´. Francamente, me encantó. Ya sé que en ese tiempo todos los “pro” ya habían llegado, pero lo realmente interesante era ver llegar a todos los demás. Cada uno con una forma de correr diferente. Correr es algo que nadie te enseña y que haces de una manera natural. Llegaban constantemente. Gente de todas las edades, con las fisonomías más variopintas con todo tipo de indumentarias, solos o acompañados, o solos con su música. Daba igual, pero todos felices de llegar.

Lo que impresionaba era ver el comportamiento y las reacciones de la gente cuando llegaba. O mejor dicho unos 100 metros antes. Mucho mejor. Cuando era evidente que en ese momento los corredores ya saben que “han llegado”…que lo han conseguido. Y lo celebran de muchas maneras. Cada uno con la suya. Los hay que lloran. Atrás han quedado los interminables días de entreno, las dudas, las apuestas personales, los que corren por alguien que ya no está, los que corren porque se intentan demostrar que lo podían hacer y lo han hecho. A veces ves a gente totalmente emocionada, casi arrastrando los pies, piensas que detrás de ese rostro emocionado hay una historia de superación. Parejas llegando de la mano y apretándose la mano. Otros que lo celebran extendiendo los brazos como si llegaran en avión. Los que esprintan porque aún les quedan fuerzas. Los hay que gritan apretando el puño.

También los había que entraban con bebés en brazos, o los que grababan el momento de la entrada para inmortalizarlo. Sé que es gente anónima, que nunca saldrán en la prensa como deportistas de élite. Pero por eso mismo, precisamente porque para ellos era un reto conseguido, era emocionante. Muy emocionante. Felicidades a todos ellos. Uno se da cuenta que a pesar del esfuerzo y sacrificio que supone, y aunque mucha gente no lo entienda, “eso” vale la pena. Y mucho!.