lunes, abril 16, 2012

Karl ,El elefante que abatió al rey.



El elefante Karl ya sabía que era una misión casi imposible. ¿ Como un elefante viejo de Bostwana podría abatir a todo un rey?.
Además un rey que en el discurso de Navidad pedía a la población un esfuerzo de responsabilidad ante la crisis, reconociendo explícitamente que su yerno Iñaki no había procedido con la discreción y profesionalidad que se le debería suponer a un consorte real.
El sueño de Karl desde la infancia había sido poder abatir a un rey. Se había convertido en una obsesión, pero él era muy consciente que sería la manera de acabar con la cacería de elefantes y la única forma era sensibilizar al mundo de lo incoherente que era matar por el hecho de matar.
Todos los elefantes de Bostwana se reían de Karl. ¿Cómo osaba pensar que algún día abatiría a un rey? .
Pero entonces hace dos años Karl conoció a la princesa Corina zu Sayn-Wiigenstein, ex cazadora de elefantes y con la que mantenía un idilio. Corina a su vez se había hecho gran amiga de Iñaki, que ansioso de vengarse de su suegro, que en lugar de defenderlo le dejó en evidencia, cuando su suegro hacía cosas mucho peores que él…) acabaron por definir un maquiavélico plan.
Corina invitaría al rey a una cacería, hipotéticamente pagada por un grupo de empresarios y posteriormente coordinaba con su amante el elefante Karl cómo sería el lance. Tal día a tal hora Karl correría hacia la caravana, pero teniendo cuidado de aproximarse a un árbol. El rey lo dispararía para matarlo. Sería muy difícil que fallara. Lo único que tenía de preocuparse Karl era elegir el árbol para apoyar su trompa en él y que el fotógrafo pudiera hacer una foto más patética. Achafando la trompa retorcida contra un árbol. La segunda parte del plan una vez muerto Karl, consistía que el personal del servicio de limpieza de la habitación del rey fregara el suelo con la grasa del bisonte que había abatido con anterioridad. El suelo estaría lo sufientemente resbaladizo para que la caída del monarca fuera inevitable.
El disparo del monarca fue certero. Minutos después Karl moría sonriendo, ¡que poco imaginaba el cazador que había sido cazado!. Lo había conseguido y Karl cumplió su viejo sueño. Abatir a todo un rey!.
La prensa ya se encargaría de “descuartizarlo” y servirlo en bandeja.
Karl, el elefante  que tomaban por loco los suyos lo había conseguido.Su muerte había servido de mucho .
Había iniciado el principio del fin de las cacerías y de las monarquías!

viernes, abril 13, 2012

El secreto del éxito


Unos dicen que son 20.000 horas de “vuelo”. Algún visionario escribió algo de 20.000 leguas submarinas. Leguas? Que raro suena. Que distancia más rara es esa. Consulto y corresponde a una distancia que una persona puede andar en una hora. Claro que eso es muy relativo, dependiendo supongo del tipo de terreno, o incluso de la edad de la persona. La distancia estimada está entre los 4 y los 7 km. Aunque la legua marina se estimara en 5,555 km (1/20 parte de un grado).

Pero en el fondo lo que me interesa comentar no es una distancia en concreto sino la cantidad de esfuerzo que se necesita para acumular la cifra de 20.000
Ahora leo un artículo que se necesita 20.000 horas de trabajo sostenido o diez años constantes de desarrollo profesional o artístico para crear una obra de arte. O para algo relevante. Y el artículo analiza muchos casos de personas que necesitaron ese tiempo para conseguir crear su “obra maestra”. Desde Mozart hasta Edison, de Einstein hasta Van Gogh. Es igual. Porque esas 20.000 horas se pueden traducir en 10 años de trabajo. Y eso si que me lo creo. Porque yo no sé cuanto ha dedicado a entrenar Rafa Nadal. Pero en horas de entreno seguro que supera las 20.000. Si comenzó a los 6 añitos, pues a sumar…..
Dos casos que defiende el artículo que sorprenden con la teoría de las 20.000 horas. El primero es que comenta el caso de los Beatles que dice que tb estuvieron antes de triunfar en innumerables conciertos diarios 6-7 horas….pero bueno al final el objetivo parece ser el superar la barrera de las 20.000. Y el otro es de Van Gogh, que trabajara 20.000 horas no se sabe si bajo los efectos del alcohol de la época (absenta) o no.
Yo calculo que debo llevar “hechas” unas 18.000 chorradas y de visitas en el blog vamos por las 11500 por lo que todavía me queda…iré pensando cuando me vaya acercando a las 20.000 visitas en empezar a confeccionar “mi obra maestra”. Todo ello claro está, bajo la supervisión de la neurociencia…Aunque si el objetivo son 20.000 igual en letras escritas ya he llegado...y ahora qué?
Por eso yo prefiero cambiar las medidas para evaluar el éxito y no pensar en 20.000 sino en “montones” de horas y “puñados” e incluso en “leguas” de trabajo entonces relativizamos el éxito…que según para quién el éxito sea tener un trabajo o simplemente el respirar.
Respecto al tiempo que se tarda en crear una obra maestra, no lo sé… pero teniendo en cuenta lo poco que se valoró a Van Gogh en vida, uno se cuestiona si al que le valió la pena fue a Van Gogh o a su marchante, bastantes años después.

La visita semanal

Yo sé que los dos sabemos lo jodido que estas, pero no nos lo decimos. Para qué?
Nos cuentas como va tu evolución y terrible lucha. Y siempre hay algo que podemos positivizar, sea que de plaquetas estas bien, o del páncreas estabilizado y ahora se centran en el hígado...y eso es bueno, creemos más o menos, , o que los parches de morfina te ayudan a descansar, o que ya no tienes las piernas tan hinchadas por los corticoides..
Siempre debemos esperar el milagro, que haberlos haylos.
Pero hoy me costaba sonreír y seguir el buen rato que estabas pasando. Te he visto tan delgado y débil...Hay dos cosas hoy que me han hecho mucha ilusion . La primera es lo que has dicho que sin no fuera por las alegrías que me da el Barça y por nuestra visita semanal te desesperarías...y la segunda es el fuerte abrazo que me das.
Porque dentro del sufrimiento y de la crueldad de tu enfermedad hay momentos de cierta distensión y de alegría. Pero yo debo superarlo y estar a tu altura, que es mucha y desde luego hoy no lo he estado...he estado triste porque te he visto muy delgado y sé que tu lo has detectado en seguida, !anda que no eres nadie psicoanalizando...! y me intentabas animar. Manda guevos!
No sé cuando me darás o te daré el ultimo abrazo, esperemos que nunca, pero mientras pueda seguir visitandote y pasar estos buenos momentos...no debo ponerme triste ni permitir que me veas así. No te lo mereces. Aunque sufra viendo como sufres. Que no es poco! Puta mierda de cáncer maldito!
Porque cada abrazo que me das cuando llego o me voy siento que un día de estos será el último. Y eso me jode. Y mucho.