Ya es la segunda semana fuera de casa. Somos intrusos en casa de mis suegros, aunque nunca seremos intrusos…espero…En cualquier caso tenemos para tres meses por lo menos para adaptarnos, pero debo de reconocer que la convivencia, del tipo que sea exige un esfuerzo por parte de todos.
Lo de siempre, mi máxima preferida nunca pruebes algo que no te puedes comprar, porque serás desgraciado el resto de tus días. Y no es el caso de casa de mis suegros un amplio piso de sarria, que comparado con nuestro piso es un palacio, sino porque el otro día probé algo que siempre me negaba a probar, que es una bici de carretera, en este caso de mi sobrino. Todo el mundo me decía …”no lo pruebes porque te engancharás…” Pero yo les decía “tranquilos, que me gusta demasiado perderme por los bosques, para pasarme a la carretera….”
Pues ocurrió lo de siempre. Que el deslizarme rápido, sin ruido por un buen asfalto de la Cerdaña es una sensación muy agradable. Casi, casi caigo en la trampa….aunque seguramente ya tendré en el cuerpo ese gusanito de “algún día…”
Y ya estamos con el ángel y el demonio propio del géminis. El ángel es el prudente, el cauto. “Que hay que ahorrar….que no estamos en tiempos para gastar, que el tiempo es limitado, que no lo puedes hacer todo…” y el demonio que te “ dice….bah… si aprovechas una buena oferta…que son cuatro días…”.
De todas maneras soy fácil de probar cosas nuevas, y eso me pierde. Tengo un amigo, Edu, que se presentó en mi casa de la Cerdaña con un flamante Porsche que le había dejado un amigo suyo arquitecto-
“Venga…vamos a probarlo, que es una pasada…vamos hasta la Seo y volvemos…” me dijo
“Pero tú que pretendes, que sea desgraciado toda mi vida??” le dije
Y como esto todo en la vida. No puedes ceder a todo lo que te gusta porque luego el disfrute nunca es proporcional. Además esto de la bici de carretera es un problema más…
Basta! Mi sueño será una Harley y ya llegaré algún día. No es que sea algo racional. Ya lo hemos comentado unas cuantas veces, pero probablemente eso es lo que me gusta.
Porque lo realmente bueno es tener el sueño, el cumplirlo es anecdótico.
El problema de un sueño es que cuando se cumple te llevas una decepción. “Y por esto suspiraba durante tiempo….pues sí, así de raros somos.
Y esto me recuerda a aquella noche que estaba tomando un Gin Tónic sólo en la terraza de un hotel de Bcn, cuando se me acerca Angelina Jolie y me dice…”¿Qué subimos…?
Solo os diré que vaya decepción! Si es que además roncaba! Que decepción si ya os digo que si no hay que probar….