el spray

Es curioso los recuerdos que evocan ciertas canciones. Estoy escuchando “Hard to say” de Chicago. Igual hacía sin exagerar unos 28 años que no la escuchaba y me remite a esas epocas donde el enamoramiento juvenil estaba a la orden del día, y en las discotecas se bailaban “lentos”. Era todo un ritual, el pedir el baile a una señorita y que te dijera que sí, eso ya era casi un milagro. Siempre estaba el guaperas de turno. Pobrecitas, lo que se perdían…je,je.
Hoy he leído una noticia que me ha impactado de una manera especial, por el inoportunismo de la misma, justo al lado de la terrible desgracia del terremoto en Italia. Si es que la vida es una lotería…pero volvamos a la noticia en cuestión, “ crean un spray que retrasa la eyaculación seis minutos…” pues vaya se me ocurren toda una serie de bromas fáciles. Imaginaros en medio del cigarro, y mientras la pareja está mirando al techo: “Ostia, que me viene!!!!”. Si es que el PSD 502 es un spray que contiene Lidocaina y prilocaina (que mal suena que todo eso acabe en “caina”…no?) y que aplicado 5 minutos antes del “acto sexual” retrasa seis veces el momento del orgasmo. Pues apañados estamos, y las que fingis todavía más que debereis de aguantar los resoplidos de la pareja seis veces más….ja,ja que se os ha acabado el “chollo”, con aquello de cómo va rapidito a dormir pronto. Supongo que eso una “rociadita” con ese spray, porque como se te ocurran varias rociaditas empalmas con el verano. En fin que sale al mercado dentro de dos años, así que los “hombretones” a esperarse. Solo existe una pequeña contraindicación y es una sensación de quemazón en la vagina!! Pues apañados estamos!. Eso en mi tierra se llama vestir a un santo para desvestir a otro. Aunque el tena no vaya de Santos…

Gran Torino

Aproveché el sábado noche y me metí, en el cine. Sólo, como casi siempre. La gente te mira raro cuando les explicas que vas sólo al cine. Una vez te sientas, observas y te sientes observado. Pobrecito!. Deben pensar aquellos que van emparejados o en grupo y te miran, rápidamente cambiando la dirección de la mirada cuando los miras, no sea que les digas algo, porque como yo soy el “rarillo”, y “no vayamos a tener algún problemilla…” deben pensar. Y es que llegué diez minutos antes de empezar la película, y eso son muchos minutos. También puedes dejar volar la imaginación, y esa mujer atractiva con el hortera de su novio, cuando te mira debe pensar “… joooder, que tio tan interesante, y está sólo. Que desaprovechado. A ese le pegaría un polvazo que lo dejaba seco…le voy a pedir a mi novio que me vaya a comprar unas palomitas y como hay cola igual me da tiempo de acercarme y por lo menos meterle mano…” Eso si que es imaginación. Cerca de mi sitio se encuentran tres amigos ya de cierta edad. Es difícil de apreciar (principalmente porque yo soy muy malo, no acierto una…) pero seguro que son gays. Uno está explicando la historia de su hermana, que está hasta el cuello con la hipoteca que le concedieron en su día, con el agravante de que le concedieron más para comprarse un coche y hacer un viaje. Y ahora que se ha quedado sin trabajo, os podéis imaginar el drama. Uno más, pienso yo.
Se me hace difícil entender porque se atraen esos señores entre si, al margen que sean educados y que hablen de temas interesantes. Y más difícil se me hace imaginarlos desnudos con sus respectivas barrigas cerveceras retozando en un colchón. Y como se deben organizar, …ahora entro yo, y tu miras…o apagamos las luces y salga lo que salga. Y es que hay cosas que nunca podré entender… pero en fin, cada uno haga lo que quiera. Por cierto que inesperada (por falta de referencias elegí esta película) y como me gustó. “Gran Torino” con un entrañable Clint Eastwood, muy diferente a lo que estamos acostumbrados a ver.

El mando "universal"

La gente ya está viendo síntomas de recuperación. Ya tardamos. Esperemos que esos síntomas no se queden en esto. Igual es la primavera, que hace que todo lo veamos a colores. Y que nos aferremos a cualquier cosa, con la esperanza de salir del túnel.
Puede que ahora que paso mucho tiempo haciendo la calle. Tengo un perro que me saca por la mañana y por la tarde. Me fijo en la gente. Ya no ríe. Igual es que estoy abducido por el eje del mal, que decía aquel payaso llamado Bush. Pero no veo que la gente ria por la calle. Y pienso…recuerdo cuando reían?...no lo sé. Pero el saludo de madrugada ya era una sonrisa. Mañana lo intentaré. Seguiré a mi perro, y cuando en el árbol deje constancia de que el es el rey del barrio, yo haré lo mismo. Porque si así no ríen poco nos queda para hacer. Después de la tormenta viene la calma. Los destrozos que está haciendo este temporal son considerables, pero veo que el cielo se esta abriendo…No “cielo” ahora no! (sí ya lo sé ,ha sido flojo, pero espontáneo, que incluso he llegado a sonreír).
Mañana voy a intentar que la gente sonría, aunque no sea risa, una sonrisa es un buen inicio. Por cierto que una amiga me contó como se divertían las amigas de sus cuñadas (Es lo típico que lo primero que piensas es que le pasa a ella pero le da vergüenza contartelo…) Ha salido al mercado una “bolas chinas”, que funcionan con un mecanismo que vibra y eso hace que sea de lo más placentero. Supongo yo. Bueno, la cuestión y lo gracioso es que el mecanismo se activa con un mando a distancia. El divertimento consistía en precisamente intercambiarse entre ellas los mandos y activarlos en los momentos más inesperados. Por lo que os podéis imaginar esas chicas se “morían de la risa”. Haber, pongámonos un poco serios. Si, que debe hacer reír el imaginarte que tu amiga está sintiendo placer mientras pide los segundos platos al camarero, pero me parece un poco extremo. Porque además con esto del sexo pasa algo muy curioso, que no te puedes reír mientras lo practicas, y no me preguntéis el porqué, pero el sexo pasa a convertirse en algo serio, no sea que la chica “afortunada” se piense que te estás riendo de “algo” suyo o al revés, y entonces todo eso ya no tiene gracia.
Lo realmente gracioso del tema sería comprarse un mando de esos “universales” que sirven para todos los utensilios electrónicos, y activarlo mientras degustas un Gin tónic y observar. Y cuando vieras a alguna mujer que por las buenas se le salen los ojos de las orbitas, es que has encontrado a la cuñada, bueno a la amiga de la cuñada…
Porque quien suele usar este tipo de aparatos, los debe llevar cuando trabaja…no? Ummm lo que se me acaba de ocurrir!!!...si es que la primavera….